- La empresa indicó que el año pasado enfrentaron casi dos casos diarios que inhabilitan o dañan la funcionalidad de cruces ferroviarios, afectando su operatividad y el tránsito vehicular. EFE Sur indicó que el robo de cables es el problema más complejo desde el punto de vista operacional y económico. En 2023 debieron reemplazar estos elementos sustraídos con un costo superior a los $330 millones.
- Asimismo, se ha desarrollado un plan de mantenimiento que permite reducir los tiempos de respuesta ante las contingencias y controlar e identificar por sistemas de televigilancia a quienes dañan la infraestructura.
Un preocupante balance hizo EFE Sur esta mañana respecto de un creciente fenómeno de robos, daños y vandalizaciones que está afectando infraestructura ferroviaria y material rodante de la empresa y cuyo efecto, además de los costos económicos, es la afectación de la operatividad de los servicios y la interacción con el entorno.
Nelson Hernández Roldán, gerente general de EFE Sur, dio a conocer un catastro ejecutado por la compañía teniendo a la vista todo el 2023 y los resultados dan cuenta de daños intencionales en las barreras automáticas de los cruces ferroviarios, robo de cables de diverso uso, además del robo de equipamiento como luminarias.
“Durante el año pasado, tuvimos 554 eventos de vandalismo en los sistemas automatizados de los cruces vehiculares. Eso significa casi dos casos diarios que inhabilitan o dañan la funcionalidad de los cruces ferroviarios, afectando su operatividad y el tránsito vehicular”, aseveró el ejecutivo. Agregó que el balance económico no es menor, pues todos estos eventos tuvieron un costo cercano a los $167 millones.
Según información de EFE Sur, en lo que va de este año, ya se contabilizan 150 casos de vandalismo en barreras de cruces ferroviarios. “Nosotros contabilizamos cuando un conductor intenta trata de sortear las barreras cuando estas están abajo y las estropea o deliberadamente son chocadas, pero también cuando los mecanismos de estos sistemas son violados buscando robar piezas o partes metálicas de ellos y terminan inutilizadas”, afirmó el gerente de la estatal ferroviaria.
Otro grave problema es el hurto de las rejas metálicas de confinamiento de las vías del tren, ya que el año pasado fueron robados más de 179 paños de malla. Esto equivale a más de 500 metros de zonas de protección ferroviaria que quedan abiertas con un evidente riesgo para las personas y animales y para la operación ferroviaria.
“Sin embargo, el problema más complejo desde el punto de vista económico y operacional para nuestra empresa es el robo de diversos tipos de cables, que hemos valorizado en $330 millones solo durante 2023. Este tipo de delito deja a sectores sin alimentación eléctrica lo que afecta a los automotores, señalizaciones y diversos mecanismos de control y seguridad del tráfico ferroviario. Hemos tomado diversas medidas que nos han permitido minimizar el riesgo durante este año”, apuntó Nelson Hernández Roldán.
Entre las medidas implementadas, están contempladas sistemas de monitoreo remoto, coordinación con equipos de fiscalización del Ministerio de Transportes y la presentación de acciones judiciales para perseguir las responsabilidades civiles y penales.
EFE Sur en el balance presentado agregó que, entre los daños provocados se agregan grafitis en carros del Biotren, vandalismo en estaciones y otros robos, lo que suman en total más de $520 millones sólo en 2023. Por ello, el gerente general de EFE Sur llamó a la población a denunciar si es testigo de comportamientos como los descritos y aseguró que la empresa deducirá acciones legales contra quienes vandalicen o roben infraestructura ferroviaria.