fiebre amarillaStock del producto, ya agotado en las clínicas, sería repuesto recién a fines de enero de 2019, lo que impedirá a personas inmunizarse antes de sus vacaciones.

El problema ya está afectando a familias que llevan meses planificando sus viajes a Brasil, destino preferido de vacaciones y una de las zonas declaradas como de riesgo por fiebre amarilla. La alarma está justificada: el verano pasado fallecieron dos chilenos tras contagiarse en ese país.

La situación de los vacunatorios del país es que ya no disponen de vacunas contra esa enfermedad. Ello, pues en los pocos centros que aún tienen dosis, estas ya están agendadas para personas que esperaron, incluso, meses.

Los temores de los viajeros se han hecho plausibles en el sitio de reclamos del Ministerio de Salud, donde los testimonios dan cuenta de un largo periplo por centros de todo el país para obtener la misma respuesta: no hay vacunas contra la fiebre amarilla.

Desde Clínica Las Condes explican que la situación se debe a un “quiebre de stock por parte del proveedor”. En Clínica Alemana prefieren no anticipar una fecha de reposición de las dosis, pues explican que todo depende del productor.

En la Clínica U. de los Andes, la jefa del vacunatorio e infectóloga María Luz Endeiza explicó que “nos quedamos sin vacunas hace dos o tres semanas. Las últimas que teníamos las pusimos a disposición con el sistema de agenda y se acabaron”.

Clínica Santa María aún tiene reservas. Pero no hay venta abierta: quedan solo las vacunas agendadas para viajeros que se inscribieron para asegurar su dosis. En el sitio web informan que el “Laboratorio Sanofi Pasteur, único fabricante y distribuidor para Chile de este producto, informó que no dispondrá de dosis hasta enero de 2019”. Por ello, cerraron al agendamiento.

Pese a esta fecha tentativa, en los vacunatorios hay incertidumbre: “Levantamos una compra con el laboratorio hace unas semanas y no nos han dado fecha. Esto es complejo, porque el público que busca asegurarse desde el punto de vista de su salud y porque se viene el periodo estival”, explica Andrea Retamal, jefa del Centro de Consultas del Hospital Clínico de la U. de Chile.

Causa del quiebre de stock

La falta de vacunas contra la fiebre amarilla se ha hecho latente en las últimas semanas, no solo en Chile, sino en Latinoamérica, según informaron desde el Laboratorio Sanofi Pasteur. La razón, explican, responde a la alta demanda de turistas por la vacuna, que supera la capacidad de producción: “El proceso para contar con una vacuna contra esta enfermedad, desde su producción hasta su distribución, es de alrededor de dos años”, añaden.

El laboratorio aclaró que “de enero de este año a la fecha se han liberado más de 100.000 dosis de Stamaril a todo el país. Como empresa, nos encontramos gestionando la mayor cantidad de vacunas que nos sea posible ingresar al país para poner a disposición. Se estima que la llegada de un próximo lote sea en enero próximo”.

Según los centros de salud, este envío arribaría cerca del 19 de enero de 2019, es decir, ya iniciado el peak de vacaciones de verano en Chile.

La fiebre amarilla es una enfermedad aguda viral, transmitida por un mosquito, presente en regiones tropicales de América del Sur y de África, que se manifiesta con fiebre aguda y coloración amarilla de la piel, seguida de hemorragia en el 15% al 25% de las personas infectadas. Actualmente, no tiene tratamiento curativo específico.

Según los expertos, el viajar a países donde la fiebre amarilla esté presente, sin haberse inmunizado al menos 10 días antes, representa un peligro. Por ello, la vacuna es recomendada por la Organización Mundial de la Salud.

Jeannette Dabanch, especialista de la Sociedad de Infectología, explicó que hay riesgo de viajar a zonas afectadas “y la gravedad de la enfermedad dependerá de cada persona. Si se va a un área de riesgo y ese viaje no es obligado, la recomendación es que no lo haga o cambie el destino. Si este viaje es impostergable, se debe hacer una evaluación para ver si los riesgos a los que se expone son altos y la recomendación ahí es usar repelente, sabiendo que esta no es una medida completa, ya que la vacuna es la medida más importante”.

Ante este escenario, el Ministerio de Salud emprendió gestiones excepcionales para tener 43 mil dosis antes de diciembre. Sin embargo, la entrega estará supeditada a la demanda de otros países que presentan la enfermedad.

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